Llegó al taller una fotografía de Manresa de 1894, la pieza es de gran formato y está compuesta por tres fotografías encoladas sobre un cartón que mide 110x35cm. Se deducía que había sido enmarcada por los restos de materiales que había sobre cartón que y se veía mucha suciedad superficial. En algunas zonas las imágenes se habían despegado del cartón y en zonas puntuales había pérdida de la imagen debido a la vorágine del pececillo de plata que se había tragado la gelatina. La intervención se basó en una limpieza en seco, la eliminación de los restos del enmarcado y la restauración de las tres fotografías. En los lugares donde había pérdida de imagen se optó por una pequeña reintegración cromática.